En cuatro imágenes
Una cosa es esto, viñeta simpática con la que estamos muy de acuerdo, sean las circunstancias que sean:
Otra muy distinta es esta otra realidad, quizás entusiasta pero tergiversadora, desde luego agitada, pero también caduca desde su origen:
O esta, que el de lo más real:
Pero no, la mujer no debe ser una fábrica multiplicadora, por cuenta ajena o cuenta propia. Toda mujer es dignísima. Y sabemos que ella es o puede ser madre. Lo decimos en este cartel. La libertad implica muchas cosas que hoy se combaten bajo la excusa de progreso y modernidad. Ocurre que ciertas palabras están dejando de tener su sentido.
Lo peligrosa es la nueva mentira, que explotando deseos sanos, se trata la realidad de forma tergiversadora, idealista, como en un mundo perfecto. O el mundo perfecto, o la opresión. Pues miren: no toda la realidad en mujeres y -desde luego en hombres- es como esta:
Por la mujer, por el hombre, que no nos engañen. Lo mejor para todos ellos.
R. de A.
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