Adormecidos ante el crimen
ECHAMOS EN FALTA recordar a los niños y niñas concebidos y no nacidos que han sido asesinados en el vientre materno en Navarra. Desde el número uno hasta los miles que ya alcanzan aquí, incluidos vasquitos y vasquitas, que hay amigos de esta rara y bella lengua que no tienen piedad ni entrañas. En España son más que cientos de miles, y en la plácida y corrompida Europa son millones.
¿Qué estás haciendo, mundo mío, gente mía, qué estamos haciendo?
Echamos en falta una capilla de oración por todos y un monumento a todos ellos.
Echamos en falta que se hable CON FRECUENCIA de este gravísimo tema en la Misa dominical de las parroquias y conventos de Pamplona.
Echamos en falta que se rece todos los domingos en la Iglesia de Navarra por el crimen del aborto.
No está bien lanzar a los cuatro vientos voces de dolor y plegarias ante los asesinados por los yihadistas en Barcelona, y a la vez callar por el aborto criminal. La diferencia es que los yihadistas están mal vistos socialmente y que el crimen del aborto va tomando carta de ciudadanía entre nosotros por LA COMPLICIDAD DEL SILENCIO.
Coincidimos con Robert Kimbal, del Movimiento Familiar Cristiano, cuando dice: "Toda iniciativa a favor de la vida y en contra del aborto, como el rezo mensual del rosario delante de la clínica abortista en Pamplona, siempre es bien recibida". Ha visto en los EE.UU. éste monumento de mármol situado a la entrada de una iglesia católica.
También coincidimos con la pancarta "ABORTO NO. Dios ama al embrión" que se exhibe enfrente del Parlamento de Navarra durante media hora todos los meses y durante largos años. Es pública en Pamplona lo mismo que el Rosario enfrente del abortorio de Ansoáin, y conocida como muy anterior a él.
Así pues, echamos en falta un monumento a los no nacidos, como el de la imagen que dice: "Las almas de los no nacidos son llevadas al cielo sobre las alas de los ángeles" ("La Verdad", nº 3989, 23-I-2015).
Dejemos de protestar contra el yihadismo criminal, contra las pateras de la extorsión, contra la violencia insoportable, contra los salarios y contratos basura... contra los abusos del gran capital internacional, contra la especulación, contra la corrupción de los políticos -protestas que resultan fáciles, de foto y buenistas-.... SI CALLAMOS O GUARDAMOS SILENCIO ante la muerte de miles de niños y niñas en Navarra, de cientos de miles de niños y niñas en España, de millones en esta corrompida y pagana Europa, antítesis de la Cristiandad.
No queremos ser hipócritas.
No queremos ser paganos.
Fermín de Musquilda
29-VIII-2017