Boletín Oficial de la Comunión Tradicionalista Carlista de Navarra

sábado, 27 de abril de 2013

CONCENTRACIÓN-DENUNCIA ENFRENTE DEL PARLAMENTO DE NAVARRA

MUY DOLIDOS POR EL TEMA QUE SE TRATA...
CONTENTOS POR CUMPLIR NUESTRO DEBER

     EL PASADO DÍA 25 tuvo lugar la concentración mensual "ABORTO NO" del 25 de cada mes, enfrente del Parlamento de Navarra. 
     Si Vd. no está presente, si Vd. no dice en voz alta qué le parecen las leyes aborteras de 1985 y 2010, u otras cualesquiera, ¿qué dirá cuándo, al fin de sus días y para abreviar su vida -pues algún día Vd. se tendrá que morir-, le dejen voluntaria y calculadamente de alimentar en el hospital? ¿Le parecerá bien que los demás callemos? 
     En algunos lugares "sanitarios" de Madrid ya se pregunta a los familiares con el eufemismo de si quieren no alargar la vida con medios ordinarios (ej. quitando la alimentación); y en Pamplona, me he enterado que en cierto lugar también ocurre. Hace tres días se lo preguntaron a mi vecina por su hermano que está en... (omito dar el nombre del Centro "sanitario"). De hecho ha llegado la eutanasia. Sí, ya se dijo que el aborto traía la eutanasia. 
     ¿Es esto lo que nos prometía el sr. Adolfo Suárez en 1978? ¿Y la flamante Constitución sin Dios firmada por don Juan Carlos? (Luego que se extraña que pidan la IIIª República, pero ¿qué se creía éste?) ¿Y los partidos que siguen el modelo del "puedo prometer y prometo" del sr. Suárez... precisamente para hacer lo contrario a lo prometido? Todos sabemos que, en Navarra, el "Sí" a la Constitución de 1978 tuvo menos votos que todas las demás opciones juntas. 
     Se dirá que decir todo esto es "meternos en política". ¿Pero no son los políticos los principales mentirosos hasta el fraude en materias esenciales como el divorcio, el aborto etc. etc.?  Y si en estas materias, en todas las demás. No, no estamos ni siquiera en democracia "técnica": esto es un fraude. 
     La cultura de los DERECHOS DEL HOMBRE SIN DIOS ha traído la cultura del HOMBRE SIN DERECHOS. NI DERECHO A VIVIR, NI DERECHO A MORIR CON DIGNIDAD Y SIN SER ELIMINADO. 
     ¿LOS PEORES?:  LA DE-RE-CHO-NA  TONTA Y CON-SER-VA-DO-RA (ayer conservaduros y hoy semi arruinados).

   (Una confidencia: yo no sé qué hacen ciertos miembros de la Coordinadora navarra por la vida. ¿Serán conservadores? Vale)


"Contra lluvia y ventisca". Foto: RdeA, 2013

Ramón de Argonz
(Ochagavía, 27-IV-2013)

viernes, 26 de abril de 2013

ROSARIO POR LA VIDA tras la DENUNCIA ANTE EL PARLAMENTO DE NAVARRA


DE AYER A HOY…

Hoy, viernes, 26 de abril, 
a las 20:00h.

NECESARIAMENTE ACTIVOS EN DEFENSA DE LA VIDA,
ES HORROROSA LA PARALIZACIÓN SOCIAL ANTE LA ACTUAL  MASACRE.
¿Se ha hecho Vd. abortista, o político “abortero”, o “mira para otro lado”, o no se entera de nada… en nuestra sociedad tan democrática y participativa?

Como todos los últimos viernes de mes, rezaremos el
ROSARIO POR LA VIDA,
ante la primera clínica-matadero de Navarra,
Lleva un año y siete meses funcionando, y han sido más de 385.000€ los que ha movido esta industria.

"Alerta Navarra" quiere que la respuesta de todos los provida navarros sea la de oposición al aborto.

Es importante que acudamos frente al abortorio, y transmitir esta iniciativa a todas las personas que conozcamos.
Somos la voz de los que no tienen voz.

Nos convoca el colectivo "ALERTA NAVARRA".

AYER nos concentramos delante del PARLAMENTO DE NAVARRA, a las ocho de la tarde, con dos pancartas, denunciando la masacre del aborto voluntario a todos los políticos por los motivos que a cada uno correspondan. Convocó la vocalía Vida y Familia de la CTC de Navarra.
Nosotros sí estamos en toda iniciativa verdaderamente provida.

Vocalía Vida y Familia de la CTC de Navarra
(26-IV-2013)

martes, 23 de abril de 2013

VALOR Y EJEMPLO CARLISTA DEL LEIZARRA DON SILVESTRE Mª ZUBITUR

EN EL AYUNTAMIENTO DE LEIZA (NAVARRA). LA LUMINARIA DE UN VIVO RESCOLDO: Don Silvestre Zubitur.
RECOGEMOS la brillante intervención del concejal don Silvestre Zubitur en el Ayuntamiento de Leiza del 26 de marzo de 2013. Este consistorio acordó por mayoría de 9 concejales de Bildu frente a 2 concejalesretirar el nombramiento de hijo predilecto de Leiza a don Antonio Lizarza, carlista e hijo de la villa. Con esta "boutade" como medida, campan a sus anchas en Leiza la negación de la realidad, la propagación de mitos nacionalistas y utopías, el gobierno municipal  con "forceps", a la contra, y al margen de los problemas reales del pueblo, el cinismo,  y una descarada  hipocresía, muy jacobino todo ello. 
La vida cristiana y honrada, sencilla y algo tímida, de los habitantes de Leiza, pone más que en entredicho el radicalismo y totalitarismo de la ideología abertzale (un marxismo que sitúa la lucha entre naciones, reales o supuestas,  como motor de la historia -no olvidemos que en sus comienzos Stalin fue ministro de nacionalidades en la URSS-). Afortunadamente, la realidad es un mentís a las utopías, que todas ellas devienen en la revancha toda vez que son incapaces de construir el futuro. 
La sociedad no aguanta el delirio de este proceder, se aislará en sí misma con amargura y total desesperanza, y sólo podrá ser salvada por el amor del que sí es capaz el hombre, y del que necesita con toda necesidad. 
De alguna manera, la verdad no necesita quien la defienda, pues se defiende sola. GRACIAS, don Silvestre Mª Zubitur, por recordar la verdad a los hijos de tu pueblo, y que con los medios electrónicos de hoy se transmite al mundo: has cumplido como el mejor, y tus palabras -sencillas, llenas de verdades y amor- son el bálsamo de realismo y la esperanza que necesitan tus vecinos. 
Los hombres buenos de Leiza de hace 75 años nos recuerdan a los populares  cristeros de Méjico, que a la vez que ejercían su derecho a la legítima defensa, rezaban y clamaban -no gritaban desaforados- "que viva Cristo Rey". 
Necesitamos mejorar nuestra vida ordinaria, reconociendo a Dios-Padre como el único Señor, origen de la vida, el matrimonio y la familia que reverencia a  sus mayores, la casa, el trabajo y el auzolan. Un pueblo así, en pie, es muy capaz de cantar zortzicos y bailar el aurresku en la vida con firmeza y alegría, y de vivir en paz sin revancha alguna. Ejemplo dieron los carlistas de ayer y lo dan hoy.  
Digo revancha como la manifestada hace muy poco por Cuadra Lasarte -nacionalista aventajado mucho antes que navarro y que no se de donde vino- en el Congreso de los Diputados sobre la laureada del escudo de Navarra, en una estrategia totalmente ajena a la resolución de los problemas reales, y muy próxima a  cabrear y, a ser posible, enconar a los vecinos. Sí, estamos en plena campaña abertzale. No saben hacer otra cosa, pues les supera arreglar la crisis humana y económica del pueblo.  Por su parte, Bildu y Ezkerra también han arremetido contra un monolito de Lecároz (valle de Baztán, Navarra), procedente del antiguo colegio de los Capuchinos y que recordaba a los profesores y estudiantes del mismo. Así mismo, han hecho desaparecer las fotografías de los hijos predilectos de Baztán, alegando "una reorganización del paisaje interior" del mismo ayuntamiento ("Diario de Navarra", 23-IV-2013). Es una muestra de que asistimos a una especie de operación "limpieza" muy primitiva, y más que decadente, parecida a la que hicieron los integristas afganos, que tienen su nombre aunque ya no lo recuerdo. Aunque creo que peor. 
(Tomamos todo el texto del propio autor, recogido también en el Blog "El Brigante").
José Fermín de Musquilda
(del valle de Baztán)
Pamplona, 23-IV-2013
CON VERDADES Y SIN REVANCHAS.
 ANTE QUIENES NO QUIEREN ENTENDER Y SUSTITUYEN LA REALIDAD CON VIOLENCIA Y POR UTOPÍAS.

LAS REVANCHAS son una forma triste de ajustar cuentas con el pasado. Es posible que retirar un reconocimiento honorífico a una persona que pensó de un modo distinto a los que hoy tienen el poder produzca satisfacción en los que mandan, pero eso no es nada en comparación con la decepción y dolorosa sensación de que las ideas callan cuando la fuerza se impone. Y si con actos así las ideas callan, las preguntas resuenan.

Por ejemplo, 

¿Cómo pudo ser que un pueblo como Leiza, tan vasco y tan trabajador y popular, fuera durante la mayor parte de la época contemporánea un bastión del carlismo?

¿Cómo pudo ser que, hasta la aparición del nacionalismo, la inmensa mayoría de los leizarras, sencillos trabajadores y pequeños propietarios, fueran carlistas de corazón dispuestos al sacrificio por defender sus convicciones?

¿No habrá tenido nada que ver el carlismo en la preservación de la cultura vasca de Leiza?

¿Aquél viejo carlismo no sería una fuerza de defensa de las libertades populares frente al centralismo liberal invasor?

¿No habrá tenido el carlismo parte en la formación de una conciencia celosa, por los derechos de la gente, y una intolerante, frente a los abusos?

Pero no se detienen ahí las preguntas que durante demasiado tiempo se han querido prohibir a los hijos de Leiza y de muchos pueblos vascos:

¿Cómo podía ser que los carlistas leizarras amaran Euskal-herria como su patria y al mismo tiempo se emocionaran con el ideal de las Españas, sin encontrar contradicción en ello?

Quizás no hay contradicción ninguna entre Euskal-herria y las Españas.

Pero hay más,

¿No enseñaban los viejos carlistas a venerar las libertades populares que llamaban fuero y a defenderlas con la misma vida?

¿No tendremos que preguntarnos qué relación tendrá aquel viejo fuero con el deseo de verdaderas libertades para Euskal-herria?

También aquí se da una contradicción, de que los que hoy hablan de fuero han logrado la abolición de su esencia y quienes buscan otro “marco institucional” para los vascos, ignoran la hermosa raíz que el fuero tiene en esta tierra de Leiza.

Por último y más importante:

¿Cómo podía ser que aquellos vascos carlistas amaran a Dios sobre todas las cosas y se enorgullecieran de llevar una vida humilde y cristiana, desde la mañana hasta la noche, desde la infancia hasta la muerte?

¿Quizá no habrá ninguna incompatibilidad entre ser vasco y la religión?

O más aún, ¿es que no fue el amor a Dios lo principal que custodiaban aquellos vascos, españoles, carlistas y leizarras?

Dejadme decir que la verdad se defiende sola. Podremos ocultarla, podremos privar a las generaciones actuales de su derecho a conocerla, pero no podremos cambiarla. El carlismo en esta tierra no fue nunca planta trasplantada que necesitara aclimatarse: fue sencillamente el decantarse de una historia milenaria que aunaba amor a Dios, al prójimo, a la justicia y a la propia identidad vasca. Por eso mismo fue siempre integrador: Dios y patria, fueros y rey. Integrar, solidarizarse, vivir en permanente auzolan, sin otra exclusión que la mentira, que el odio y que el rencor.

Me podréis decir que deliro, que dibujo un panorama idílico e inexistente. No es verdad. La razón de ello es que no hablo de ninguna ideología (y podría extenderme en las mentiras que se han vertido sobre el carlismo, vinculándolo con enemigos históricos, como el fascismo), sino de un pueblo que tan sólo quiere construir su propia vida y defender las tradiciones que le han dado su identidad. Por supuesto, que entre los carlistas hubo de todo, pero no porque eran carlistas. En tanto que carlistas eran hijos del pueblo y de Dios y sus errores personales no ensombrecen ese glorioso empeño común.

Dejadme deciros una última cosa: vosotros queréis construir una patria con una ideología. Los carlistas nunca tuvimos una ideología, sino una patria que conservar, que merecer, que transmitir. Por eso, vosotros podéis haber visto en los carlistas de ayer y de hoy enemigos que no tienen cabida en vuestra patria soñada. Esa ventaja tenéis sobre nosotros: nosotros, sin embargo, os necesitamos, aunque vosotros creéis que no nos necesitéis, porque para reconstruir la patria, el pueblo, la vida en común no podríamos prescindir de nadie, porque todos estamos llamados a ayudarnos a vivir una vida más digna y más humana. Ésa es nuestra debilidad, pero ésa también es nuestra gloria.

Mi defensa de un hijo del pueblo no es una defensa personal ni partidista, es una llamada de atención, un recordatorio a unas cuantas preguntas que todavía se acallan.


Esta segunda intervención tuvo lugar después de la lectura del “escrito en contra de la iniciativa del ayuntamiento de Leiza para la retirada del nombramiento de hijo adoptivo de Leiza de D. Antonio Lizarza”, que reproducimos a continuación.

En primer lugar diré que por la diferencia de edad no he conocido a D. Antonio aunque si conocí a su hermano D. Nazario, que vivía en Leiza, cuando nosotros éramos pequeños, y también a todos sus sobrinos, hijos de su hermano D. Rufino y los hijos de este y los nietos, pues son de mi edad y por último los biznietos que son de la edad de mis hijos. Lo que si, he tenido la oportunidad de conocer a dos de los hijos de D. Antonio, D. Javier y D. José Antonio con los cuales he mantenido y mantengo una gran amistad por su personalidad y fidelidad en todo momento y como representante de este ayuntamiento por el honor y la dignidad de todos ellos y con todo merecimiento quiero hacer esta defensa.

En segundo lugar diré que siempre me ha gustado escuchar a las personas mayores en sus tertulias y entre ellos hablaban muchísimo de D. Antonio y de lo que les ocurrió aquí y allá, pero tengo que reconocer que entre aquellas vivencias y a menudo estremecedoras, nunca escuche una conversación con el mínimo rencor hacia las personas que habían sido sus adversarios, al contrario la mayoría de aquellos hombres y mujeres supieron rehacer sus vidas pasando todos, toda clase de penurias, se respetaron y convivieron en adelante, dejando ejemplo para la posteridad.

A D. Antonio Lizarza el pueblo de Leiza le nombró hijo adoptivo, y ahora el pueblo de Leiza le va a retirar. ¡Pobre Leiza como te han cambiado! Pero yo os diré que a D. Antonio Lizarza, jefe carlista en Navarra,  que no era hijo adoptivo de Leiza, sino que natural de Leiza y a mucha honra para él y para muchos leizarras,  eso sí que no le vais a quitar porque cambiareis la historia pero nunca, nunca, nunca la realidad.

Y por todo ello también diré que esta iniciativa que habéis presentado no hace más que demostrarme que yo en algo estaba equivocado, pensaba que aquellas tertulias de nuestros mayores, aplacaban a toda persona que no quería que sus hijos pasaran por lo que ellos tuvieron que pasar, pero veo el rencor y el odio de otras personas siguen buscando el enfrentamiento.


Silvestre Mª Zubitur

domingo, 21 de abril de 2013

EN EL AYUNTAMIENTO DE LEIZA, EN NAVARRA. LA LUMINARIA DEL RESCOLDO: Don Silvestre Zubitur.

RECOGEMOS la brillante intervención del concejal don Silvestre Zubitur en el Ayuntamiento de Leiza. La vida cristiana y honrada, sencilla y algo tímida, de los habitantes de esta villa, pone más que en entredicho el radicalismo y totalitarismo de la ideología abertzale (un marxismo que sitúa la lucha entre naciones, reales o supuestas,  como motor de la historia -no olvidemos que en sus comienzos Stalin fue ministro de nacionalidades en la URSS-). Afortunadamente, la realidad es un mentís a las utopías, que todas ellas devienen en la revancha ya que son incapaces de construir el futuro. 
La sociedad no aguanta el delirio de este proceder, se aislará en sí misma con amargura y con una total desesperanza, y sólo podrá ser salvada por el amor del que sí es capaz el hombre, y que necesita con toda necesidad. 
De alguna manera, la verdad no necesita quien la defienda, pues se defiende sola. GRACIAS, don Silvestre Zubitur, por recordar la verdad a los hijos de tu pueblo, y que con los medios electrónicos de hoy se transmite al mundo: has cumplido como el mejor, y tus palabras -sencillas, llenas de verdades y amor- son el bálsamo de realismo y esperanza que necesitan tus vecinos. 
Los hombres buenos de Leiza nos recuerdan a los cristeros de Méjico, que rezaban y clamaban -no gritaban desaforados- "que viva cristo Rey". Necesitamos mejorar nuestra vida ordinaria, reconociendo a Dios-Padre como el único Señor, origen de la vida, el matrimonio y la familia con sus mayores, la casa, el trabajo y el auzolan. Un pueblo así, en pie, es muy capaz de bailar en la vida con firmeza y alegría. 
Tomamos todo el texto recogido a continuación del Blog "El Brigante", dirigido por don José Antonio Ullate.
José Fermín de Musquilda
Pamplona, 21-IV-2013
Posted: 20 Apr 2013 01:57 PM PDT


El pasado martes santo, 26 de marzo de 2013, el ayuntamiento de Leiza acordó por mayoría absoluta (9 concejales –de la izquierda abertzale– sobre 11) retirar el nombramiento de hijo predilecto de Leiza a don Antonio Lizarza, carlista e hijo de la villa. Otro hijo de Leiza, mi amigo el concejal Silvestre Zubitur, valientemente intervino en el pleno del consistorio en protesta contra esa cobarde decisión. Recojo a continuación sus palabras y ruego que se difundan y mediten. Aún quedan hombres. Un abrazo, Silvestre. J.A.Ullate

***
Las revanchas son una forma triste de ajustar cuentas con el pasado. Es posible que retirar un reconocimiento honorífico a una persona que pensó de un modo distinto a los que hoy tienen el poder produzca satisfacción en los que mandan, pero eso no es nada en comparación con la decepción y dolorosa sensación de que las ideas callan cuando la fuerza se impone. Y si con actos así las ideas callan, las preguntas resuenan.

Por ejemplo, 

¿Cómo pudo ser que un pueblo como Leiza, tan vasco y tan trabajador y popular, fuera durante la mayor parte de la época contemporánea un bastión del carlismo?

¿Cómo pudo ser que, hasta la aparición del nacionalismo, la inmensa mayoría de los leizarras, sencillos trabajadores y pequeños propietarios, fueran carlistas de corazón dispuestos al sacrificio por defender sus convicciones?

¿No habrá tenido nada que ver el carlismo en la preservación de la cultura vasca de Leiza?

¿Aquél viejo carlismo no sería una fuerza de defensa de las libertades populares frente al centralismo liberal invasor?

¿No habrá tenido el carlismo parte en la formación de una conciencia celosa, por los derechos de la gente, y una intolerante, frente a los abusos?

Pero no se detienen ahí las preguntas que durante demasiado tiempo se han querido prohibir a los hijos de Leiza y de muchos pueblos vascos:
¿Cómo podía ser que los carlistas leizarras amaran Euskal-herria como su patria y al mismo tiempo se emocionaran con el ideal de las Españas, sin encontrar contradicción en ello?
Quizás no hay contradicción ninguna entre Euskal-herria y las Españas.

Pero hay más,

¿No enseñaban los viejos carlistas a venerar las libertades populares que llamaban fuero y a defenderlas con la misma vida?

¿No tendremos que preguntarnos qué relación tendrá aquel viejo fuero con el deseo de verdaderas libertades para Euskal-herria?

También aquí se da una contradicción, de que los que hoy hablan de fuero han logrado la abolición de su esencia y quienes buscan otro “marco institucional” para los vascos, ignoran la hermosa raíz que el fuero tiene en esta tierra de Leiza.

Por último y más importante:

¿Cómo podía ser que aquellos vascos carlistas amaran a Dios sobre todas las cosas y se enorgullecieran de llevar una vida humilde y cristiana, desde la mañana hasta la noche, desde la infancia hasta la muerte?

¿Quizá no habrá ninguna incompatibilidad entre ser vasco y la religión?
O más aún, ¿es que no fue el amor a Dios lo principal que custodiaban aquellos vascos, españoles, carlistas y leizarras?

Dejadme decir que la verdad se defiende sola. Podremos ocultarla, podremos privar a las generaciones actuales de su derecho a conocerla, pero no podremos cambiarla. El carlismo en esta tierra no fue nunca planta trasplantada que necesitara aclimatarse: fue sencillamente el decantarse de una historia milenaria que aunaba amor a Dios, al prójimo, a la justicia y a la propia identidad vasca. Por eso mismo fue siempre integrador: Dios y patria, fueros y rey. Integrar, solidarizarse, vivir en permanente auzolan, sin otra exclusión que la mentira, que el odio y que el rencor.

Me podréis decir que deliro, que dibujo un panorama idílico e inexistente. No es verdad. La razón de ello es que no hablo de ninguna ideología (y podría extenderme en las mentiras que se han vertido sobre el carlismo, vinculándolo con enemigos históricos, como el fascismo), sino de un pueblo que tan sólo quiere construir su propia vida y defender las tradiciones que le han dado su identidad. Por supuesto, que entre los carlistas hubo de todo, pero no porque eran carlistas. En tanto que carlistas eran hijos del pueblo y de Dios y sus errores personales no ensombrecen ese glorioso empeño común.

Dejadme deciros una última cosa: vosotros queréis construir una patria con una ideología. Los carlistas nunca tuvimos una ideología, sino una patria que conservar, que merecer, que transmitir. Por eso, vosotros podéis haber visto en los carlistas de ayer y de hoy enemigos que no tienen cabida en vuestra patria soñada. Esa ventaja tenéis sobre nosotros: nosotros, sin embargo, os necesitamos, aunque vosotros creéis que no nos necesitéis, porque para reconstruir la patria, el pueblo, la vida en común no podríamos prescindir de nadie, porque todos estamos llamados a ayudarnos a vivir una vida más digna y más humana. Ésa es nuestra debilidad, pero ésa también es nuestra gloria.

Mi defensa de un hijo del pueblo no es una defensa personal ni partidista, es una llamada de atención, un recordatorio a unas cuantas preguntas que todavía se acallan.

[Esta intervención fue acompañada de la lectura del siguiente “escrito en contra de la iniciativa del ayuntamiento de Leiza para la retirada del nombramiento de hijo adoptivo de Leiza de D. Antonio Lizarza”].


En primer lugar diré que por la diferencia de edad no he conocido a D. Antonio aunque si conocí a su hermano D. Nazario, que vivía en Leiza, cuando nosotros éramos pequeños, y también a todos sus sobrinos, hijos de su hermano D. Rufino y los hijos de este y los nietos, pues son de mi edad y por último los biznietos que son de la edad de mis hijos. Lo que si, he tenido la oportunidad de conocer a dos de los hijos de D. Antonio, D. Javier y D. José Antonio con los cuales he mantenido y mantengo una gran amistad por su personalidad y fidelidad en todo momento y como representante de este ayuntamiento por el honor y la dignidad de todos ellos y con todo merecimiento quiero hacer esta defensa.
En segundo lugar diré que siempre me ha gustado escuchar a las personas mayores en sus tertulias y entre ellos hablaban muchísimo de D. Antonio y de lo que les ocurrió aquí y allá, pero tengo que reconocer que entre aquellas vivencias y a menudo estremecedoras, nunca escuche una conversación con el mínimo rencor hacia las personas que habían sido sus adversarios, al contrario la mayoría de aquellos hombres y mujeres supieron rehacer sus vidas pasando todos, toda clase de penurias, se respetaron y convivieron en adelante, dejando ejemplo para la posteridad.
A D. Antonio Lizarza el pueblo de leiza le nombró hijo adoptivo, y ahora el pueblo de Leiza le va a retirar. ¡Pobre Leiza como te han cambiado! Pero yo os diré que a D. Antonio Lizarza, jefe carlista en Navarra,  que no era hijo adoptivo de Leiza, sino que natural de Leiza y a mucha honra para él y para muchos Leizarras,  eso sí que no le vais a quitar porque cambiareis la historia pero nunca, nunca, nunca la realidad.
Y por todo ello también diré que esta iniciativa que habéis presentado no hace más que demostrarme que yo en algo estaba equivocado, pensaba que aquellas tertulias de nuestros mayores, aplacaban a toda persona que no quería que sus hijos pasaran por lo que ellos tuvieron que pasar, pero veo el rencor y el odio de otras personas siguen buscando el enfrentamiento.


Silvestre Mª Zubitur

miércoles, 17 de abril de 2013

¿Esta democracia en España puede ser cristiana?

     Ya hace muchos años que reflexionando sobre los personajes de la Pasión me pareció que Pilatos era el liberal. La pregunta que dirige al Señor “¿Qué es la Verdad?” era una prueba suficiente. Ahora me entero que Kelsen, el santón de la democracia, justifica la actuación de Pilatos diciendo que se ajusta a los cánones democráticos: duda de qué sea la Verdad y recurso a la voluntad de la mayoría para decidir.

     En aquellas reflexiones no dudé de asimilar a Judas con los demócratas cristianos. Leí que algunos exégetas se inclinaban a atribuir su traición al desencanto que sufrió al ver que el Reino de Jesús no era como los de este mundo. Hoy, después de haber visto cual ha sido el resultado de la política de la democracia cristiana en Europa a lo largo del siglo XX me reafirmo en que en la Pasión estaban representados por Judas.

     En la capilla de la Asociación de Propagandistas Católicos, en una pared lateral, hay una placa que recuerda cómo allí se reunieron diversos miembros de la Asociación para trabajar por la restauración de la democracia en España en los tiempos de la transición. A la placa en cuestión había que adjuntar otra en que se enumeraran las consecuencias de tal restauración democrática:
     Estado ateo anticristiano, anulación civil del matrimonio cristiano, el asesinato de los no nacidos elevado a la categoría de derecho, imposición por parte del Estado de una educación anticristiana, burla al matrimonio natural al asimilarlo a la nefanda unión de dos homosexuales, etc.

     La placa en cuestión me recuerda a otra que dicen existe en otra capilla similar de Francia donde se reunieron bajo la presidencia del Obispo Dupanloup, los dirigentes de aquel movimiento que preconizaba “Iglesia libre en Estado libre”. Frase brillante que refleja un imposible. Porque el Estado libre al modo que lo imponen los revolucionarios, no se ha limitado a ser libre; ha terminado por oprimir a la Iglesia. A nuestros cristianos demócratas de hoy no les ha servido de nada la experiencia vivida.

     Surge en España la democracia cristiana en el seno de un movimiento que propugnaba una acción seglar católica. Aportaba una serie de iniciativas buenas; para ser justos tenemos que decir magníficas. Magníficas excepto una: creer que a ellos les correspondía la acción política con exclusión de otros grupos católicos. Y el siguiente paso, admitir que esa acción política se desarrollaría en consenso con los grupos revolucionarios enemigos de la Iglesia. Para los demócratas cristianos el principio democrático, hoy desprestigiado en todo el mundo, tiene tanto valor como los artículos de la Fe. Por eso los demócratas cristianos de todo el mundo simpatizaron con los rojos durante la Cruzada. Con una glacial indiferencia a los sufrimientos de los españoles, sus hermanos en la Fe, (¿o es que no eran sus hermanos en la Fe?) apoyaron moralmente a quienes les perseguían y martirizaban.

     No ocurrió eso en España. No ocurrió porque los del bando rojo, sus correligionarios en democracia, arremetieron contra ellos y les hicieron objeto de la misma persecución que a los que no eran demócratas. Los demócratas cristianos españoles tienen en el cielo una serie de correligionarios suyos, que dieron la vida por la Fe. A pesar de las claudicaciones de la democracia cristiana internacional. Los demócratas cristianos españoles, en la transición, no supieron aprovechar la experiencia vivida.

     Hoy España está en manos de los epígonos de Poncio Pilatos. ¿Quién ha hecho la entrega? Los epígonos de Judas. No cabe la menor duda.Ellos mismos lo consideran una gloria y lo recuerdan en una placa colocada en un templo.
     Carlos Ibáñez Quintana

Publicado en "Asociación Cruz de San Andrés", 17-IV-2013

viernes, 12 de abril de 2013

LA CORRUPTA FINANCIACIÓN DE LOS "ABORTORIOS" O MATADEROS DE PERSONAS POR LOS GOBIERNOS DE "DE-RE-CHAS"

Que el P.P.N. y U.P.N. "se apliquen el cuento".
Basta ya de las "leyes" a-bor-te-ras de 2010 y 1985.
Basta ya de ayudas a matar: basta de los líos y excusas mentales, pues las cosas son lo que en realidad son.
El holocausto ahí está: y en un país que dicen democrático y donde triunfan los derechos del hombre. Sí, ahí está.

EN NAVARRA, LA DENUNCIA REALIZADA POR LA C.T.C. FRENTE LOS GOBIERNOS DE U.P.N., HA SIDO CONTINUA DESDE HACE MUCHÍSIMOS AÑOS. 
Un artículo esclarecedor en el digital "Hispanidad", 12 - 04 - 2013


Las monsergas del PP con la ‘obligada’ financiación del aborto

Con los tibios siempre ocurre lo mismo: necesitan justificar su propia cobardía. El Gobierno Rajoy es tibio en muchas cosaspero en ningún otro asunto como en el derecho a la vida. Sí, hablo de aborto, porque según el inefable presidente socialista andaluz, Griñán, las expropiaciones soviéticas de vivienda programadas se harán para respetar el derecho a la vida. Y el que quiera aprender, que vaya Salamanca.
Pero volvamos al PP, porque la macedonia mental, macedonia interesada, del PP, respecto a la financiación del aborto afecta a toda España y a todas las comunidades autónomas. La pregunta es: ¿está obligada una comunidad autónoma a financiar el asesinato de inocentes en el vientre materno, esto es, a pagar abortos? Por ejemplo, Navarra Confidencial nos habla de eso mismo para la Comunidad Foral.
Entendámonos: cualquier administración puede negarse a financiar el crimen del aborto. Hasta la Ley Zapatero de 2010 no se les podía exigir ni con sofismas. Pero las comunidades del PP, por ejemplo, la de Madrid, lo financiaban. Se trataba de una despenalización. Por tanto, no había nada que financiar con dinero público.
Luego llegó la Ley Aído 2010: continuó el aborto libre pero ya no era un homicidio no castigado sino un derecho en toda regla. Rajoy, el tibio, se aferró a este detalle y todos los gobiernos del PP, sobre todo los autonómicos, se apresuraron a excusarse: lo siento, ahora el aborto es un derecho, por tanto tengo que financiarlo.
Un sofisma como una casa. Veamos: en la Constitución existen muchos derechos que el Estado tiene la obligación de defender pero no de financiar. Por ejemplo, el derecho al trabajo, pero eso no significa que un presidente autonómico deba crear puestos de trabajo artificiales y pagar los salarios de los mismos. También existe el derecho a la vivienda pero las CCAA y ayuntamientos no regalan casas a todo aquel que no la tenga. Insisto: no hablo de procurar sino de financiar.
Además, si el aborto es un derecho cabe discutir si se debe financiar el aborto en los hospitales públicos. Pero, miren por dónde, el PP ha utilizado el argumento para financiar abortos en cualquier abortorio privado. Y sobre esto no tiene obligación alguna. Lo hace porque le da la realísima gana.
Naturalmente, apenas hay abortos en hospitales públicos, porque un médico que ha obtenido una plaza en la sanidad pública quiere curar a la gente, no convertirse en un matarife. Quieren ayudar a la vida no a la muerte.
Y en los hospitales privados lo mismo. Los buenos hospitales privados hacen prácticas que pueden implicar abortos, ciertamente, como la FIV, pero no tienen mataderos para cargarse embarazadas. Porque una cosa es callarse frente al aborto y otra perpetrarlos.
Además, con los hospitales privados las administraciones crean convenio, donde se especifica qué prestaciones médicas financiará el sector público a ese centro privado. Naturalmente, es el pagano quien decide qué actividades financian y cuáles no.
Lo cierto es que los abortos, casi el 100 por 100, se perpetran en abortorios, no en clínicas. Abortorios que las más de las veces lo único que hacen es eso: matar niños. Y es a esos a los que financian todos los partidos -PSOE y nacionalistas- y también el PP.
En resumen: el PP paga los abortos porque le sale de las narices. No tiene por qué hacerlo pero pretende pasar por un partido progre de derechas. Es decir, de los que dicen defender la vida y luego financian el homicidio.
Y en este punto me da un poquito de repugnancia.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com

jueves, 11 de abril de 2013

Ya en Pamplona: "CRISTIADA" o "FOR GREATER GLORY"


HA LLEGADO la película sobre la persecución religiosa en México 
a los "Cristeros" (de Cristo Rey). 
Animamos a todos a ir a verla con toda la familia (salvo los más pequeños debido a la dureza de algunas escenas). 
Conmueve la fe en Cristo que manifiestan los personajes, especialmente los niños. 
Aunque la comercialización ha ocultado su trasfondo religioso y ha puesto su título en inglés, quizás para ocultar su contenido real, la película es más que suficientemente histórica y expresiva de lo que fue aquello. 

En 18-XI-1926 S.S. Pío XI explicaba la durísima situación del catolicismo en Méjico en su encíclica "Iniquis afflictisque". Más adelante publicará otras dos encíclicas "Acerba animi" y "Firmissimam constantiam". 
Hace años era impensable que se realizase y distribuyese película como ésta, por muy bien hecha que estuviese. Ahora se ha realizado una obra de arte cinematográfica, se ha redactado un documento histórico, y se ofrece un revulsivo martirial en los difíciles tiempos que nos corresponde vivir. 

Salas: Carlos III (Avda. de San Ignacio) y La Morea (Pamplona)



Ficha del film

Director: Dean Wright; Interpretes: Andy Garcia, Oscar Isaac, Eva Longoria, Santiago Cabrera, Peter O'Toole, Bruce McGill, Rubén Blades, Catalina Sandino Moreno, Bruce Greenwood, Nestor Carbonell, Eduardo Verástegui, Adrian Alonso, Luis Rosales, Karyme Lozano, Tenoch Huerta, Raúl Méndez; Género: Drama. Bélico; Año de producción: 2012; Guión: Michael Love, Dean Wright ; Música: James Horner; Fotografía: Eduardo Martínez Solares; Duración: 142 min.