MÁS PERSECUCIÓN RELIGIOSA
NO SON SIMPLES ACTOS vandálicos. Basta de eufemismos y de ocultar el verdadero significado de las cosas. Se trata de una muestra de la persecución religiosa que va envolviendo a España cada vez con mayor intensidad.
Nada es casual, todo tiene sus causas, y es absurdo y de malos gobernantes poner tronos a las premisas y cadalsos a las consecuencias.
Esta Navidad y de lo que sepamos, primero fue el incendio del Belén municipal de Villa del Prado, en Madrid, que también afectó a la fachada de la casa consistorial. Se baraja la posibilidad de que estuviese provocado.
Ha sido el ataque contra varias figuras del Belén municipal de los jardines de la Taconera en Pamplona, ocurrido el pasado día 24. Tiraron varias figuras así como elementos de grandes dimensiones.
Pero el laicismo también ha llegado a Cantabria. El Niños Jesús del Belén de la céntrica Catedral de Santander ha sido atacado. También han roto una mano a la figura del bueno de José. Un amigo, cántabro-casta él, nos cuenta de primera mano que en la mañana de ayer, miércoles día 30, un vecino de la ciudad, que había asistido a la Santa Misa, compró la figura del Niños Jesús, trepó por la muralla en donde estaba el Belén, y repuso su figura del Niño. En la celebración de la Santa Misa que hubo después en la catedral, el sacerdote, que en la homilía había anunciado el triste suceso,anunció, en los avisos finales, que una persona anónima había colocado una nueva figura.
Pero lo más serio, hasta provocar un agudo dolor por la inacción de los pamploneses, la vergüenza del actual Ayuntamiento EH-Bildu de Pamplona, y la absoluta inutilidad de las instituciones judiciales, es que se mantenga la exposición con un número profanador y sacrílego contra el Santísimo Sacramento en la sala de exposiciones conde Rodezno, situada además en el monumento de Navarra a sus muertos en la Cruzada. Para colmo del sonrojo acaban de cambiar el nombre a la plaza por el de plaza de la Libertad.
Iniciada esa exposición profanadora, el 9 de diciembre hubo otra asquerosa profanación en Nalda (La Rioja).
El pasado martes día 29 de diciembre, más de sesenta personas rezaron de nuevo el Santo Rosario delante del monumento, como se acordó hacer todos los martes, mientras esté abierta dicha exposición, a la seis de la tarde. Es lo mínimo que se puede hacer: lo mínimo. Otras veces había más personas, como doscientas. Recordamos los mil concentrados y manifestados en la plaza del Ayuntamiento el jueves 26 de noviembre, a los pocos días de abrirse la exposición. Esto significa que la gente y los católicos se van olvidando. Luego celebraremos los Navidades y comeremos turrón. Pero nosotros no olvidamos. No podemos olvidar. Incluso sabemos que el presidente de la CTC de Navarra, todos los días de fiesta civil o religiosa acude a rezar el Santo Rosario, de rodillas y con su boina roja, enfrente de las cuatro fotografías de la profanación. Dice que lo hace lleno de vergüenza por su propia y absoluta inutilidad y por la de todos.
Vista parcial de los asistentes. Doloridos, seguramente ninguno cree que por rezar ahí hacen algo extraordinario. Foto:FdeM20015. (Derechos de autor) |
Si insultasen a don Felipe de Borbón, a la presidente del Gobierno de Navarra, al señor alcalde y a no sé quién más, habría una acción contundente de los tribunales, una protesta unánime de todos etc. etc. Se pondría el grito en el cielo. Aquí, se comete una profanación y sacrilegio, se insulta a Dios y a todos los católicos -esto último es una consecuencia-, y no pasa prácticamente nada. El caso está en los tribunales, pero la exposición sigue y ni siquiera hay una medida cautelar. Incluso algún edil ha llegado a manipular a otros concejales y la opinión pública, y a mentir como un bellaco, para desviar la atención de la profanación sacrílega contra Dios Nuestro Señor, diciendo que el insultado en la concentración citada fue el señor alcalde de su propio partido EH Bildu, mantenido por Geroa Bai.
Miren: en los insultos, ofensas, amenazas, agresiones físicas o morales etc. lo que importa es el hecho. Yo no quiero que peguen y sigan pegando a mi madre, por ejemplo, y que lo sigan haciendo en Navidades, Año Nuevo y cuando les plazca. Ahí está la profanación sacrílega y los tribunales ni mu. Y dicen que hay Justicia. Y luego nos dirán que las instituciones funcionan, que son maravillosas, que la Constitución de 1978 nos hace felices, que el Estado es "neutro", y no se cuántas tonterías más. Sí, se lleva muchísimo tiempo engañando a los vecinos, ciudadanos, españoles.
Así que o hay una conversión de los católicos, o se echa con la ley en la mano a los gobernantes que toleran e incluso apoyan semejante profanación-sacrilegio, o se pone un gran interrogante a la forma, leyes e instituciones actuales de convivencia. Convivir así, no merece la pena. Lo primero es lo que más importa, y ya queda dicho.
F. de M.
Pamplona, 31 de diciembre de 2015
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